Mi equipo OSASUNA, mis fiestas SAN FERMIN, y mi Estado NAFARROA-NABARRA-NAVARRA-NAVARRE. Soy Osasunista,sanferminero, y por encima de todo Nabarro, pero de la Navarra Entera - Nafarroa Osoa. En este blog escribiré sobre estas mis pasiones especialmente, pero tambien de otras que se me vaya ocurriendo. Sea política, deporte, etc.. ONGI ETORRI-BIENVENIDOS a mi blog, y espero que lo disfruteis

viernes, 9 de diciembre de 2016

LA LIBERTAD, UNA ESTRATEGIA PARA GANAR


Joxe Iraurgi, Lekeitio (NABARRA)

Nelson Mandela, un ciudadano libre que marcó una estrategia para ganar, tuvo la visión clara que solo la tienen los grandes líderes de fundar un pais para todos los Sudáfricanos, pudo haberse aprovechado del aislamiento y del desprestigio del apartheid que solo contaba con el 12% de la población blanca, en el último congreso del CNA cuando la mayoria pugnaba por la venganza, él se impuso con la razón y sin odios a favor de la unión de toda la ciudadania para crear una nueva constitución y un nuevo pais entre todos.

Simón Bolivar y Xavier Mina, el primero de ascendencia Nabarra y el segundo Nabarro,fueron grandes líderes y ciudadanos libres, Simón ayudó a varios pueblos de nuestra América a liberarse del yugo colonial siendo su ideal la creación de la confederación de la Grán Colombia.
Xabier Mina después de haber sido gerrillero contra Napoleón, fue pieza clave en la desconquista de Mejico, tanto Simón como Xavier lucharon incansablemente contra el imperialismo absolutista español, este úlimo fue asesinado bajo las órdenes directas del rey absolutista Fernando VII.

Catalina de Fois, Margarita de Nabarra y Juana de Labrit fueron tres reinas de NABARRA libres que reinaron en el siglo XVI, en plena guerra de religión, estas tres maravillosas mujeres influyeron en el renacimiento, basta decir que el mismo Sakespeare dijo aquello de “NABARRA ASOMBRARÁ AL MUNDO” la corte de PAU fue refugio de los perseguidos por la inquisición europea.
En el siglo XVI-XVII una vez perdida la independencia de Nabarra por conquista y genocidio. El primer Estado moderno europeo y cuna de la libertad quedó en hibernación, hasta que una serie de patriotas nabarros nos han desentrañado toda la verdad de las irracionales conquistas realizadas por el imperialismo franco español vaticanista.

En el siglo XXI Nabarra debe de volver a brillar como símbolo de LIBERTAD aportando a la humanidad todo su bagaje histórico reactualizado, recobrando el Estado y la territorialidad con su contrapoder de los Infanzones de Nabarra y la legislación del DERECHO PIRENAICO todo ello reactualizado al siglo en que vivimos.
En el ESTADO NABARRO recuperado caben todos los que quieran ser Nabarros, no importan los credos colores etnias ect, se puede ser de cualquier parte del mundo y Nabarro al mismo tiempo, en síntesis doble y triple nacionalidad sin menoscabo de ningún derecho ciudadano, con la condición “sine cuanon” de que los impuestos se abonen en NABARRA.



jueves, 8 de diciembre de 2016

NAVARROS-NABARRAS ANTE TODO Y POR ENCIMA DE TODO

Esta encuesta es un ZASCA! en toda regla para todos los partidos del arco parlamentario de la Alta Nabarra (Comunidad Foral de Navarra).
Cada uno vive en su egocentrismo sin querer ver el sentimiento real de la ciudadanía navarra. Un sentimiento que cada vez que se hace una encuesta se ve reflejado mayoritariamente. Como la que también pongo del periódico El Mundo hace tres años, más de la mitad de los encuestados, sentimiento solo de nuestra tierra. Cuando discuten que si nacionalidad vasca o española, nadie quiere ver la nacionalidad nabarra o navarra, y el no ver esto, hace que nos tengan a la ciudadanía navarra dividida. ¿Porqué no nos damos cuenta de lo que nos une y no de lo que nos separa? ¿Hasta cuando? Hay que despertar.
Nabarra esna! Navarra despierta!


martes, 6 de diciembre de 2016

NUESTRA CONSTITUCIÓN , SON LOS FUEROS DE NABARRA

Hoy es el dia de la constitución española, pero no de la constitución navarra, los navarros teniamos nuestra propia constitución que son los Fueros, que son nuestras propias leyes emanadas de nuestras propias instituciones. Por esto Navarra no puede ser nunca foral y española, o es foral o es española. Si defendiésemos de verdad nuestros fueros, si los recuperásemos, recuperaremos nuestra soberanía para tomar nuestras propias decisiones en todos los ámbitos.
"Los Fueros en su origen fueron códigos jurídicos que se otorgaban los diferentes consejos vecinales de lo que vendría a ser el Reino para regular la vida diaria y solventar los conflictos que surgían entre ellos y que con la creación del Reino de Navarra pasaron a ser unos Estatutos que limitaban el poder del rey y regulaban las relaciones entre éste y los ciudadanos, por lo que los Fueros fueron expresión del poder originario y del procedimiento para ejercer dicho poder. En palabras actuales, los Fueros eran la Constitución de Navarra."
Nuestra constitución son los Fueros de Navarra, y tenemos que recuperarlos.
NABARRA- NAFARROA - NAVARRA.

SE CELEBRA UNA CONSTITUCIÓN QUE NO ES LA NUESTRA

Este es el día en que los españoles celebran que tienen una Constitución vigente. Una constitución que regula sus derechos y obligaciones.
No es la nuestra. No es el resultado de nuestra evolución política como sociedad libre y soberana. El constitucionalismo navarro echa sus raíces en lo más profundo de la Edad Media, y se hace patente con Sancho VI el Sabio. Ahí empieza nuestro camino como navarros por regular nuestras vidas por nosotros mismos. Ahí es donde ya ponemos por escrito cuáles son nuestros derechos, cuáles nuestras obligaciones, y cuáles los límites del ejercicio del poder estatal.
Tanto en los territorios ocupados como en aquellos que permanecieron libres hasta 1512 de la dominación española, los navarros hemos ido desarrollando nuestra propia Constitución en el poco margen que se nos ha dejado. Constitución que fue derogada en el siglo XIX, en plena Edad Contemporánea. Una constitución que nos fue arrancada por las armas, por la violencia, imponiéndonos leyes, políticas, administraciones y en definitiva una forma de vivir y desarrollarse que nos era ajena. Ni peor ni mejor, simplemente ajena a esta sociedad conquistada. Y por tanto denunciamos hoy la imposición de una Constitución que no es la nuestra, sino que se alza pisoteando aquella que nuestros antepasados defendieron, aquella por la que dieron su vida. Martin Ttipia, Mariscal Pedro, Enrique III, Malataz, Mina, Iriarte y Barricart, todos los navarros que salieron a las calles en la Gamazada, y las innumerables mujeres y hombres anónimos que dieron su vida por la libertad. Libertades más dignas de amor que la propia vida.
En el parte del juicio de guerra a Iriarte y Barricart se lee:
"considerando asimismo por las declaraciones testificales que se comprometió bajo su firma a seguir y llevar a efecto la conspiración que tenía por objeto la independencia de Navarra, cuyo documento confesó el mismo Iriarte haber firmado (…).Condena a la propia pena al comandante del Segundo Batallón de Tiradores Don Pablo Barricart, por resultar justificado: que se mantuvo al frente de su batallón cuando se pronunció la insurrección, y que en vez de contenerla, continuó a su cabeza y vino a Pamplona"
Si creen que los navarros nos hemos olvidado de nuestra sed de libertad es que no nos conocen.
Si creen que desapareceremos como lágrimas en la lluvia es que no entienden lo que tienen ante sus ojos.
- Gaizka Basaldua
6 de Diciembre de 2015

lunes, 5 de diciembre de 2016

LA NABARRA DEL NABARRI

Jon Nikolas Lz. de Ituiño
Autor de “Arquitectura de las naciones” y “El surco de Babel”

 ¿NAVARROS, POR QUÉ Y DESDE CUÁNDO?

El derecho a decidir no es un acto de fe, es un acto democrático. La democracia no es una ciencia infusa sino que corresponde a un principio de libertad, donde el respeto a todas las libertades abre el debate a las distintas opiniones contenidas en la pluralidad. La fe no exige conocimiento, basta con creer lo que alguien dice y seguirle ciegamente; la democracia, en cambio, parte de la necesidad de comprender una realidad para explicarla y llegar a entenderla como solución para lograr el bien común de una mayoría. El conocimiento democrático es el camino al entendimiento.

El título de este escrito no pretende ser provocativo sino ponderado. Una advertencia a ciertos deslumbramientos que pueden cegar la visión clara del conjunto. En definitiva, creo que es importante que la dimensión del árbol no impida ver el interés del bosque que alcanza hasta los orígenes de nuestro pueblo.

El pueblo del euskara, Euskal Herria, sabemos que somos vascones desde la conquista romana. Un nombre gentilicio que los conquistadores latinos aplicaron a las gentes que ocupaban la cubeta del Iberus Flv., HERRIBEHERA, al que su geografía de ocupación denominó AGER VASCONUM. Por encima, hasta las montañas, situaban el SALTUS VASCONUM, un territorio que comprendía los valles altos de AUÑAMENDI, BORTUETA, su Pyrenæus latino.

En un tiempo de confusión inducida resulta que vascos parece que sólo somos las gentes de un territorio periférico occidental y los originarios vascones han pasado a ser NAVARROS, con V bien marcada. En el siglo pasado se acuñó un nuevo gentilicio propenso a seguir confundiendo la realidad antropológica con la doctrina del divide y vencerás. Así fue como mi abuelo paterno, nacido en Biana, era vasco-navarro y, yo mismo, tengo que reconocerme bien como vasco, o bien optar elevando el listón para afirmar con coraje (junto a Mikel Sorauren y otros nabarros) que NABARRA ES EL ESTADO DE LOS VASCOS.

Pero, ¿desde cuándo entran en la historia de Euskal Herria los navarros? Y, ¿por qué se escribe con /V/ si en origen los cronistas del siglo VIII escribieron nabarri, con /B/?

La fecha del año 778 está señalada en la historia por la expedición de Carlomagno, al frente de un poderoso ejército, dirigiéndose a Cæsaraugusta. En la primavera del año 778, después de superar las cumbres de AUÑAMENDI, BORTUETA, Pyrenæus, Carlomagno se apoderó de IRUÑA, Panpelvn. El itinerario descendente desde IRUÑA hacia Medina Saraqusta, Zaragoza, debía seguir por Olite, HERRIBERRI, paso obligado de los carolingios, atravesando el territorio de los Banu Qasi.

Las crónicas de este tiempo son muchas. En los Annales Regii (año 778) se dice: Carlomagno entra en Hispania por dos caminos diferentes; él mismo llega a Zaragoza pasando por Pamplona, mientras otro ejército, con soldados de Burgundia, Austrasia, Baviera, Provenza, Septimania y Lombardía, se le unen en Zaragoza. Carlomagno recibe rehenes de Ibinalarabi, Abutauro y otros sarracenos (Ibinalarabi et de Abutauro et de multis Sarracenis), destruye Pamplona (Pampilona distructa), somete a los hispanos, wascones, y también a los nabarros, y se vuelve a Franconia (Hispani, Wascones sugiugatos et etiam Nabarrii, reversus in partibus Franconiæ). Los textos reconocen un itinerario inequívoco de Carlomagno con el grueso de su ejército, mientras el segundo cuerpo de su armada hacía la tenaza entrando en la Península por los Pirineos-Orientales.

La crónica cita a Hispani, Wascones y Nabarri, tres gentilicios que definen por su lugar de origen a un conjunto de personas que forman colectividades diferenciadas para el historiador franco. Son gentilicios bien definidos. Primero sitúa a los Hispani, en el territorio más oriental de la Girona mediterránea por donde avanzaron las tropas de refuerzo; luego lleva su referencia al camino principal recorrido por Carlomagno a través del país de Wascones y Nabarri, por donde en sentido inverso regresará a Franconia. Para el cronista franco estaba claro que los vascones estaban localizados en la región septentrional de AUÑAMENDI, BORTUETA, Pyrenæus; la Vasconia que los nietos de Carlos Martel habían reducido, desde el LOIRA hasta la cuenca del río DORDOÑA en el año 769, era sabido que tenía su continuidad en la Península. En el pensamiento germano del cronista carolingio los Hispani eran otras gentes, pueblos situados en territorios más orientales.

El itinerario descendente de Carlomagno en su dirección hacia Zaragoza forzosamente tuvo que atravesar el territorio de los muladíes Banu Qasi. Era «el territorio de la gran llanura próxima a los montes»,  NABA HERRI, NABARRI, como corresponde al pensamiento original de las gentes de Euskal Herria. Sin otra referencia que la expresión propia del euskara los cronistas francos difícilmente podrían haber recogido el gentilicio que identificaba a sus habitantes. Gentes que hablaban en el euskara de la población autóctona de HERRIBEHERA, propio del legado histórico de un idioma normalizado entre las comunidades de la gran cubeta del IBAIBEHERA. Sin duda, con la continuidad léxica, la lengua funcional mantenía vivo el pensamiento que se expresaba en euskara.

En el territorio de HERRIBEHERA propio de los nabarri, Carlomagno no encontró resistencia a pesar de que los Banu Qasi, maulas de los Omeyas, mantenían su fidelidad al emir Abd al-Rahman de Córdoba. Ni en la historiografía de las fuentes carolingias, como tampoco en las crónicas musulmanas, existe reseña alguna que contemple algún choque en territorio de los muladíes.

Sin embargo, es con la relación espacio-temporal del contacto de los francos con los muladíes donde se da, por primera vez, la aparición en las crónicas francas del apelativo nabarri. Se refiere a las gentes del siglo VIII, habitantes del AGER VASCONUM, aspecto importante y significativo por lo que representa para la extensión del euskara como lengua funcional en HERRIBEHERA. Esta denominación fue recogida de manera directa por alguien que tuvo contacto presencial con personas de la región mientras Carlomagno se dirigía hacia Medina Sarakusta.

El mismo trayecto tuvo que seguir a su vuelta de Medina Saraqusta, Zaragoza, para dirigirse a IRUÑA, Pampalona. El itinerario obligado después de su fracasada expedición cuando, Carlomagno, recorrió con un cuerpo de ejército más numeroso perdiendo los rehenes recibidos, en su viaje de ida, al atravesar NABA HERRI: en aglutinación NABARRI, la «depresión de terreno entre dos vertientes». Quizá aquellos rehenes recibidos de Abutauro, cuando bajó de IRUÑA en la primavera, fueron quienes ilustraron al cronista confirmándole su condición de NABARRI, habitantes de la gran cubeta del IBAIBEHERA.

Como dice J. M. Lacarra (“La expedición de Carlomagno a Zaragoza y su derrota en Roncesvalles”, 1981): Son los “Anales menores”, los que saben más detalles del viaje de Carlos a Zaragoza, a diferencia de los que podemos llamar oficiales. En su trabajo establece con rigor los pasos y el camino que siguió Carlomagno hasta llegar a Saraqusta (Zaragoza). Allí se encontró con las puertas cerradas por la negativa musulmana a cumplir el pacto de Paderborn sellado el año anterior. En resumen, la conclusión de J. M. Lacarra es convincente: Un análisis detenido de los Anales carolingios nos permite distinguir tres etapas:

a) Llegada a Pamplona y sumisión de la plaza (et adquisivit civitatem Pampeluna). Después de dejar una guarnición de francos en IRUÑA, Carlomagno siguió el itinerario dirigiéndose con sus mesnadas hacia HERRIBEHERA.

b) Presentación de Abu Tauro a Carlos, entregándole rehenes; han llegado, pues, a tomar por primera vez contacto con los musulmanes. Fue en su descenso hacia el *IBAIBEHERA, Ibervs Flv., wãdĩ  Ibru, donde, forzosamente, tuvo que alcanzar Olite, HERRIBERRI, nabarrorum oppidum, plaza fuerte del nabarri musulmán. En esta etapa fue cuando se hizo presente la realidad euskalduna de las gentes que vivían en HERRIBEHERA; gentes del AGER VASCONUM de los romanos vueltos NABARRI con el euskara. Así es como aparece el gentilicio nabarro unido a la presencia de la autoridad de los Banu Qasi en la cubeta del *IBAIBEHERA, Ibervs Flv. latino, wãdĩ  Ibru árabe.

c) Llegada del ejército de Carlos a las puertas de Zaragoza.
Por el orden en que se recorrieron las tres etapas se confirma una cronología y un trayecto del itinerario inequívoco que siguió Carlomagno tras la conquista de IRUÑA. La importancia de que, por  primera vez, el ejército de Carlomagno tomase contacto con los muladíes nabarri cuando avanzaba hacia el IBAIBEHERA demuestra que IRUÑA era ciudad de los vascones. Más abajo, en el inicio de la cubeta de HERRIBEHERA, estaba la ciudad de Olite, HERRIBERRI, nabarrorum oppidum, solar originario de los Banu Qasi. La entrega como rehenes del hijo y el hermano de Abu Tawr al poderoso ejército invasor es la constatación de la alarma y la prudencia de los nabarri ante la evidencia de la fuerza armada de Carlomagno.
Sin el legado histórico del euskara y su valor descriptivo para encontrarnos en la memoria de Euskal Herria, no tendríamos un presente para avanzar hacia un horizonte con futuro.

El exponente más representativo de los vascos es su lengua. La conocida expresión Lingua navarrorum figura en el documento del año 1167, conservado en la Catedral de IRUÑA. NABARRA es la designación que adoptó el viejo reino de Pamplona con Sancho VI el Sabio, como referencia a la lengua extendida a todos los lugares del nuevo Estado pirinaico.

Fuente:  http://ianasagasti.blogs.com/mi_blog/2014/12/la-nabarra-del-nabarri.html


viernes, 2 de diciembre de 2016

FRANTZES DE JASO, DE NABARRO A PORTUGUÉS PERO SIEMPRE VASCO

De nabarro a portugués, pero siempre vasco
Iñigo Saldise Alda

El próximo día 3 de diciembre se celebra un nuevo día de más de la colonial Comunidad Foral y española de Navarra, coincidiendo con la festividad cristiano-católica de San Francisco Javier.
San Francisco Javier nació el 7 de abril de 1506 en el Estado de Nabarra y su nombre original fue el de Frantzes de Jasso. Miembro de una familia noble, era hijo del presidente del Real Consejo de Reino de Nabarra, Juan de Jasso y de la que posteriormente firmaría como la triste María de Azpilkueta. A su vez era hermano de Magdalena, Ana, Miguel y Juan. Estos dos últimos fueron destacados combatientes por la libertad de la Patria nabarra. Por tanto, no cabe ninguna duda de cuál era su nacionalidad.
Durante la guerra de Nabarra comprendida entre los años 1512 y 1530, sus hermanos Miguel de Xabier y Juan de Azpilkueta atacaron en el año 1521 el castillo que había construido el rey español Fernando II de Aragón en la Iruñea ocupada y sojuzgada. Esta fortaleza española en el corazón de Nabarra fue defendida por las tropas invasoras españolas, entre las que se encontraba un soldado con rango de capitán, Iñigo López de Loyola o de Recalde. En el transcurso del combate cayó herido y fue enviado a su Azpeitia natal por los propios caballeros nabarros que le habían herido, una vez liberada la capital del Estado de Nabarra. Allí se recuperaría de sus heridas abandonando posteriormente su vocación militar, sustituyéndola finalmente por la religiosa.
Con la ocupación española asentada en el Reino de Nabarra tras la debacle de la batalla de Noain, este se traslada a estudiar a la Universidad de Sorbona de París en el año 1525. Allí coincide con Iñigo de Loyola con quien finalmente fundaría la Compañía de Jesús, más conocida como los jesuitas. Pero antes de formarla sus discusiones se centraron en la política, pues uno era nabarro y el otro español. Indiscutiblemente ambos poseían una cultura común, como así lo demuestra el idioma que utilizan en sus debates, que no podía ser otro más que el euskara o vascuence, vamos la lingua navarrorum.
En París definitivamente, Iñigo siendo ya Ignacio convence a Frantzes de su proyecto religioso, lo que les lleva a presentarse en el año 1537 por primera vez ante el Papa, emperador de Roma o Jefe Supremo de la Religión Cristiano-Católica; esto fue tres años después de realizar votos de castidad junto a sus hermanos de la Compañía de Jesús. Ese mismo año es ordenado sacerdote. Posteriormente y ante un viaje frustrado a Tierra Santa por la guerra existente entre la República de Venecia y el imperio Otomano de Turquía, Frantzes ya como Javier, le pide al Papa permiso para ir de misionero.
Pero en lugar de elegir ir bajo pabellón español, Francisco de Javier parte a Lisboa en el año 1540. Su itinerario le hace pasar por Azpeitia, pueblo natal de Ignacio, para entregar unas cartas de éste a la familia. Evita intencionadamente pasar por Xabier, donde fue “desahuciado” por los españoles a los 10 años, tras ser desmochado su hogar, el castillo familiar, y su foso rellenado el año 1516 por orden del Cardenal español Cisneros. Sus viajes le llevarán hasta Japón, muriendo en una lengua desconocida para el chino Santa Fe, un 3 de diciembre del año 1552 en una pequeña isla de la China imperial.
Frantzes de Jasso nació nabarro y podemos afirmar decir que murió como portugués bajo el nombre de Francisco de Javier, pero nunca dejó de ser vasco. Así podemos deducir de la relación que tuvo con el también vasco Iñigo de Loyola, el cual nació como castellano, es decir español, y murió como tal en Roma en el 1556.
Detrás de un viaje espiritual más allá de sus misiones religiosas, Frantzes cambió su nombre por Francisco, sin dejar nunca de ser vasco, cambió incluso su nacionalidad nabarra por la portuguesa. Eso sí, nunca por la española, ya que él sufrió la violencia y sanguinaria acción militar española contra los suyos y el resto de nabarros.


lunes, 28 de noviembre de 2016

HOMENAJE A LOS DEFENSORES DE LA INDEPENDENCIA DE NABARRA. 27 DE NOVIEMBRE DE 1512




Homenaje a los defensores de la independencia de Navarra que intentaron liberar Pamplona/Iruñea en 1512

CRONICA DE CORREA DEL ATAQUE DEL 27 DE NOVIEMBRE DE 1512

Nos situamos en noviembre de 1512. El legítimo soberano de Navarra, Juan de Albret, ha lanzado una ofensiva contra los invasores castellanos para liberar su reino, conquistado en julio de ese mismo año, y ha conseguido llegar hasta las puertas de Pamplona, en la que se ha encerrado el duque de Alba con sus tropas para hacerle frente.
El monarca navarro ha plantado su real ante el frente oeste de las murallas de la capital, en el lienzo que va entre la iglesia de San Lorenzo y la Torredonda, y justamente por esa zona va a lanzar su ataque para liberar la capital de los ocupantes españoles.

A continuación, cedemos la palabra a Luis Correa, cronista del duque de Alba y testigo presencial de estos hechos, para que nos narre en castellano de la época lo que ocurrió aquel sábado 27 de noviembre de 1512 en este mismo lugar:

“El rey Don Juan como el pregón fue dado así como el duque ordenaba de dentro para su defensa, así él proveía para la ofensa, en esta manera: puso en la delantera trescientos hombres de armas a pie con una bandera colorada, con ciertas bandas de oro en ella (RESULTA EVIDENTE QUE HABLA DE LA BANDERA DE NAVARRA AUNQUE NO LA CITE EXPRESAMENTE),),, a la cual todos aguardaban y juraron de no la desamparar. Estos caballeros eran de los gentileshombres del rey Don Juan con muchos franceses que se apearon para tenelles compañía. A estos caballeros hacían espaldas todos los gascones, que sería un escuadrón de ocho mil ballesteros y escopeteros. A estos seguía el escuadrón de los alemanes que serían seis mil. La retaguardia de todo tenía Mosior de la Paliza con hasta tres mil hombres darmas asegurando el campo contra nuestro socorro. A los lados de estos escuadrones estaba mucha gente suelta de bearneses y gabachos, en número de más de seis mil hombres. Estos tenían a cargo las escalas y mantas para cuando menester fuese…

Gorazarrea_Homenaje_29N.pdf

http://xaviermina.org/2013/12/03/homenaje-2013-a-los-defensores-de-la-independencia-de-navarra/?lang=es

martes, 22 de noviembre de 2016

NO ES TERRORISMO! NO ES TERRORISMO!

NO ES TERRORISMO, NO ES TERRORISMO, NO ES TERRORISMO, NO ES TERRORISMO.., y así cien mil veces más y lo que haga falta para decir alto y claro, que una pelea de fin de semana no se puede tratar de terrorismo por mucho que lo repita una y otra vez la derecha española y todo ejército propagandístico de medios de comunicación y tertulianas y tertulianos de televisiones a su servicio.
Pero sobre todo es muy triste ver en las redes sociales, e incluso en tertulias de tv, como hay nabarras y nabarros que repiten como loritos lo que dice la derecha española y sus medios de comunicación.
Es muy triste que haya nabarras y nabarros que defiendan esto como terrorismo, que estén tan ciegos, que estén tan controlados, que no vean que son jóvenes , que como cualquier otro joven puede meter la pata y buscar una pelea..¿Cuantas peleas hay un fin de semana? ¿Y en cuantas peleas se habrán visto afectados guardia civiles en cualquier parte del Estado español? No se puede tratar de terrorismo una pelea por mucho que les buscasen la boca por ser guardia civiles.., tendrían que tener sus sanciones correspondientes por lesiones, pero nada más, de ahí a terrorismo, es criminalizar a unos jóvenes y sobre todo a un pueblo al que la guardia civil le tiene muchas ganas como es Altsasu.
Pero lo peor de todo es que las nabarras y nabarros caigamos en lo que tanto desean desde España, que nos odiemos los unos a los otros, que estemos divididos, ya sabes eso de "divide y vencerás", pues así nos tienen a las nabarras y nabarros desde hace más de 500 años...
Antes de 1512, años antes, había una guerra civil en el Estado Reino de Nabarra , entre Beaumonteses y Agramonteses, curiosamente Castilla apoyaba a los Beaumonteses, como única finalidad hacerse con el Reino de Nabarra.  Ya desde entonces, Castilla, lo que ahora llamamos España, hizo todo lo posible para dividirnos aprovechando guerras internas.
Pero no les salió bien la jugada, ya que Juan de Albret y Catalina de Foix, supieron poner orden y calmar esa guerra interna entre Agramonteses y Beaumonteses..
Y que pasó? Que Fernando el Falsario, mandó al Duque de Alba invadir y conquistar Nabarra.. , y así fue en 1512.., y tras unos nueve años de luchas, los nabarros tuvieron que rendirse a los españoles.
Desde entonces, los españoles han conseguido mantenernos divididos.., y eso se traduce en el hoy en día, donde nos tienen totalmente divididos, pero lo que es peor, que trabajan continuamente desde España para que nos odiemos, y lo que es todavía peor, muchas nabarras y nabarros caen en ello , y colaboran en este odio entre nabarr@s  contribuyendo a la división de nuestro pueblo.

Ya sabeis aquello,,"divide y vencerás", y es lo que lleva haciendo España durante mas de 500 años.
Las nabarras y nabarros deberíamos defendernos, estar unid@s , al menos la mayoría, y arroparnos.. Nabarra debería  estar por encima de todo. Hay una frase que suelo utilizar. "Ante todo y por encima de todo soy nabarro", y este lema deberíamos usarlo tod@s y cada un@ de l@s nabarr@s.. ¿Tan complicado es defender lo nuestro y defender a los nuestros y a las nuestras?.

Cuando alguien acusa de terrorismo a un@ de l@s nuestr@s, deberíamos apoyarle la mayoría de Nabarra.
La derecha española con la complacencia de la mal llamada izquierda española, y a través de su herramienta de la Audiencia Nacional, van a juzgar a jóvenes nabarr@s por terrorismo por la trifulca en Altsasu..
Van a destrozar la vida de much@s jóvenes con futuro, y tambien la de sus familias.. Igual salen indemnes, pero salgan o no , ¿quien les va a devolver este tiempo robado?

La mayoría de las nabarras y nabarros deberíamos empezar a pensar solo como nabarr@s, y defender lo nuestro, y no dejar que nos dividan, y no dejar que nos metan el odio entre nosotr@s. Mientras nosotr@s nos odiamos, ellos desde la lejanía se ríen y se frotan las manos..

Nabarra fue un Estado independiente, pero consiguieron dividirnos, y así seguimos hoy en día..
El día que pensemos solo como nabarras y nabarros, el día que pensemos que ante todo y por encima de todo somos nabarras y nabarros, ese día comenzará la libertad e independencia y recuperación de nuestro Estado, Nabarra.

Gora Altsasu
Gora Nabarra 
Ni naiz Altasu



sábado, 19 de noviembre de 2016

EL FEMINISMO Y LA TOLERANCIA RELIGIOSA EN LA NABARRA DEL SIGLO XVI.

NABARRA, Primer Estado moderno Europeo y de libre pensamiento

(Extracto del artículo sobre El Feminismo y la Tolerancia Religiosa en la Nabarra del siglo XVI )
Por: Jon Oria oses

La destrucción del Reino Independiente de Navarra en el siglo XVI no se debió al azar sino que fue provocada por España y Francia para así repartirse nuestro territorio con el beneplácito del papado. Si es verdad que muchos judíos y más tarde los humanistas se refugiaron en Navarra perseguidos por la Inquisición, fueron otras las razones por las que se produjo inicialmente la Usurpación de la Alta Navarra por Fernando el Católico siguiendo una política fundamentalista e intolerante. No es extraño que llamen la atención las diferencias entre la Corte de Navarra y los espectáculos macrabros de las Inquisiciones de España y de Francia, sobre todo si se consideran los logros conseguidos en Navarra durante el reinado del sangüesino Enrique II de Albret y de su esposa Margarita cuyos éxitos fueron más tarde coronados por Juana de Albret y Enrique III. A Navarra se deben, por ejemplo, los comienzos de la liberación de la mujer y de la libertad de conciencia en una Europa dividida por los sectarismos religiosos y dominada por un chauvinismo machista que se oponía a llevar a cabo los lemas del Humanismo más puro. Fue con el Heptameron cómo la Reina Margarita expresó a través de una colección de relatos los ideales del Renacimiento en Navarra. Los escribió a raíz de la publicación de los cuentos de Boccaccio en una traducción al francés en 1545 y en ellos se pueden vislumbrar principios feministas inauditos para su época. La oposición de España a la obra de Margarita (1527-1549), de Juana de Albret (1555-1572) y de Margarita de Valois (1572-1615) por ser ellas quienes "llevaban los pantalones" en la Corte de Navarra es en sí un hito, más tarde completados por el empeño de Enrique III de Albret en traer la paz a Europa tras las cruentas guerras de religión que asolaron a Francia. Años después de su coronación en París (15723), y sin renunciar al proyecto de su madre, Juana de Albret, proclamó por el Edicto de Nantes (1598) la Libertad de Conciencia para todos, incluidos los protestantes, una de las mayores conquistas, según Thiers , para Europa y para la humanidad. Pero esto le acarreó la muerte y el vil asesinato a mano de un maníaco, F. Ravaillac (1610) que había sido programado por el papado, España y Francia, quiso en vano dar vuelta atrás a la historia; por desgracia resulta lamentable constatar que el legado de Margarita y de Henrique III esté aún por cumplir por lo que toca a la integridad del Reino de Navarra, todavía víctima de la política colonialista de España y de Francia

Margarita de Nabarra

SOBRE LOS "BANDOLEROS" DE AMAIUR

Mikel Zuza, historiador.  En su perfil de facebook, contesta a Del Burgo tras su publicación en Diario de Navarra sobre la exposición de Amaiur.

J. I. del Burgo publicó ayer en Diario de Navarra un artículo a cuenta de la exposición sobre el castillo de Amaiur que estos días se exhibe en el palacio del Condestable, en el que como era de esperar insiste en las mismas monomanías ¿históricas? con las que él y su padre llevan machacándonos las meninges desde hace casi cien años. No se me ocurre otro caso semejante de la -por otra parte- actitud tan hispana del "sostenella y no enmendalla" por estos lares, aunque por supuesto, eso no convierte sus tesis en ciertas, pese a que hayan contado siempre con el viento "oficial" a favor. Dice cosas como estas:
-"Este episodio bélico sucedió siete años después de la incorporación de Navarra a la Corona de Castilla (1515) mediante "unión eqüeprincipal" (de igual a igual), sobre la que se han escrito ríos de tinta. Dicha incorporación a la Monarquía más poderosa de Europa, fue el lógico desenlace de la condición hispana de Navarra, que se expresa con rotunda claridad en el Fuero General de Navarra..."

 El término jurídico "eqüeprincipal", que Del Burgo emplea siempre como si fuera el perejil de todas las salsas, queda muy bonito en su arcaico latín, pero no constituye bálsamo ninguno para la herida sangrante que la conquista -y no la incorporación, por mucho que el longevo político se empeñe en dulcificar el asunto- de Navarra supuso, pues la única verdad la dejó lapidariamente establecida el duque de Alba cuando expresó bien claramente a los jurados de la sitiada Pamplona que "Nunca serán los vencidos quienes impongan sus leyes a los vencedores. Rendíos, o vuestra ciudad será reducida a cenizas". La "condición hispana" de Navarra, que el Fuero recoge únicamente para conferir a los reyes de Navarra la legitimidad de los soberanos visigodos, perdida tras la conquista musulmana, no avocaba en ningún caso a "lógico desenlace" alguno, y mucho menos a una conquista a sangre y fuego como fue la emprendida por Fernando de Aragón. Lo cierto es que cada vez que Navarra pudo elegir entre ser independiente y no serlo, escogió siempre la independencia (ahí están los ejemplos de 1134, 1234 o 1328 para demostrarlo), pero claro, eso es mejor no decirlo, no vaya a ser que las navarras y navarros comencemos a preguntarnos cosas que sólo pueden dilucidar los gurús de la Foralidad como Del Burgo.

-Sigue diciendo el insigne historiador:
"A principios del siglo XVI, Navarra se hallaba inmersa en una larga y cruenta guerra civil provocada por el enfrentamiento de de dos bandos nobiliarios, agramonteses y beaumonteses (el pueblo llano era el sufridor de los desmanes de ambas facciones). Eran reyes de Navarra Juan de Albret y Catalina de Foix. Ambos miraban más por los intereses de sus extensos dominios en Francia que por los de un reino empobrecido como era Navarra. En 1512 se aliaron con Luis XII en la contienda europea que enfrentó al rey francés con el papa Julio II. En este contexto, se produjo la ocupación de Navarra por Fernando el Católico, legitimada por sendas bulas papales, que excomulgaban a los reyes navarros y, conforme al derecho de la época, les privaba de su reino por su alineamiento con el monarca francés. En 1513, las cortes navarras reconocieron al aragonés como rey y señor natural. En 1515 éste decidió que a su muerte, sucedieran en el trono navarro, quienes fueran sus herederos en Castilla. Todo ello sin mengua de su condición de reino."

 Uffff, habría tanto que decir... Empezaré argumentando que, a principios del siglo XVI, concretamente para el año 1507, Navarra estaba ya en paz. ¿Por qué razón? Porque los reyes Juan Y Catalina, esos que según Del Burgo sólo pensaban en sus posesiones francesas, habían conseguido derrotar a los beaumonteses y expulsar de Navarra al conde de Lerín, su líder-marioneta. ¿Marioneta de quién? Pues naturalmente del rey Fernando de Aragón, que era quien desde al menos 1472 sostenía desde el exterior esa facciòn con vistas a debilitar Navarra por todos los medios posibles, cosa que hasta ese momento había logrado a la perfección.
 El riguroso trabajo basado en las fuentes de historiadores como Alvaro Adot, ha demostrado sobradamente la importancia extrema que Juan y Catalina concedían a Navarra, cuyo dominio les confería la condición regia, y Del Burgo y los de su escuela lo saben perfectamente, aunque les resulte mucho más cómodo -y más falso también- seguir con la matraca de que eran reyes extranjeros (como su admirado Fernando, por otra parte), aunque reinaran casi treinta años y casi todos los pasasen entre nuestras mugas, donde nacieron por cierto todos sus hijos, entre ellos el heredero, Enrique, que lo hizo en Sangúesa, y no en un retrete de Gante, como Carlos de Habsburgo, ya que nos ponemos puntillosos. La "ocupación" (cierta materia, por mucho que se le eche azúcar, sigue oliendo igual de mal) fue fruto de una conquista injusta, la defendiese el papa de Roma -siempre presionado por los ejércitos castellano-aragoneses radicados en la cercana Nápoles- o no lo hiciese. Julio II lo único bueno que aportó a la humanidad fue su encargo a Miguel Angel Buonarroti de la decoración de la Capilla Sixtina. Aparte de eso no fue más que un mercenario casi siempre al servicio de Fernando de Aragón, que era quien le había conseguido la tiara al quitarle de su camino a los Borgia. Navarra era un país soberano y podía por tanto dirigir su política exterior como mejor le pareciera, sin que otros países (Castilla, Aragón, Francia o Syldavia) tuvieran derecho alguno, ni humano ni divino a entrometerse. Las "Cortes navarras" de 1513 fueron sólo un paripé orquestado por el invasor Fernando para que la facción beamontesa -la única que estaba presente en las mismas- inclinara su cabeza o abriese más sus nalgas (en este caso el orden de los factores no altera el coproducto [Sic.]) para acabar con la independencia de Navarra, lo que evidentemente -diga lo que diga Del Burgo para marear la perdiz- menguó definitivamente su condición de reino. Y si sólo se dicen medias verdades -no hubo "Cortes de Navarra" en 1513, sino Cortes del bando beaumontés-, es exactamente igual que mentir.


En resumen: puedo entender que no te guste una determinada visión histórica que se dé en una exposición como la del Condestable, pero no que aproveches que el Arga pasa por Belaskoain para repetir los mismos tópicos una y otra vez, y que al contrario de lo que dijo cierto alemán (y no oriental, precisamente) no se van a convertir en auténticos porque insistas en ellos mil veces. Por cierto, no lo he dicho, pero el artículo de Del Burgo se titula: "Héroes o bandoleros", ya que esta última es la categoría que concede a los últimos defensores de la independencia de Navarra en 1522.

¿Y sabéis lo que os digo? Que si es por eso, prefiero mil veces ser un "bandolero" como los que defendieron la causa perdida de Amaiur, que ostentar títulos nobiliarios o políticos donde -en el partido del propio Del Burgo lo saben muy bien- campe a sus anchas la primera acepciòn de "Bandolerismo" del Diccionario de la Real Academia de la Lengua: "Conjunto de desafueros y violencias propias de los bandoleros"

viernes, 11 de noviembre de 2016

Leyendas en torno al Estado de Nabarra

Sacado del blog Soberanía de Navarra 

-Leyenda de las Navas de Tolosa y las cadenas: Esta leyenda no surgió realmente de los navarros, sino que fue introducida por los invasores españoles en la Navarra cispirenaica.
Los españoles buscaban con ella, introducir en el imaginario navarro, una falsa unidad de los territorios ocupados, con las coronas que conformaron el reino de España, debido simplemente, ante la gran política Estatal existente en la Navarra ultrapireniaca o soberana, durante el Renacimiento Humanista, la cual era llevaba a cabo por la Reina legítima de todas las tierras de Vasconia, Juana III de Albret y cuya denominación correcta es Navarrismo.


- Leyenda sobre la reina de Navarra, Juana de Albret, sí nacida esta leyenda en territorio navarro, en los valles colindantes a la selva de Irati, Aezkoa y Zaraitzu.
En los días de niebla, las personas que se introducen sin temor el la selva de Irati, si prestan un pelín de atención, podrán ver la majestuosa figura de la reina Juana III de Navarra, la cual está acompañada por al menos, cien leales caballeros navarros, valientes y patriotas, que se disponen seguros de ello, a reconquistar todas las tierra pertenecientes al Estado de Navarra del sur de los Pirineos, donde aún día, el pueblo navarro se encuentra esclavo por la ocupación y la represión de las tropas invasoras españolas.

- Leyenda de San Miguel de Aralar. Nacida de un libro de Navarro Villoslada, "Amaia o los vascos del siglo VIII"
Uno de sus personajes, tras cometer un doble y atroz parricidio, se impone como castigo unas cadenas que traba a su cuerpo, castigándose a vagar las laderas de la sierra de Aralar, soportando tan colosal peso, hasta que las cadenas se rompan, liberándolo tras completar su castigo.
Al encadenado Teodosio de Goñi, en una gruta se le apareció un terrorífico dragón, temeroso por su vida suplicó a los cielos. Sus súplicas fueron escuchadas y apareció el arcángel San Miguel, quien mató al dragón. En ese instante las cadenas se rompieron y quedó en libertad, para así poder marchar a luchar junto al resto de vascones y crear el Reino de Pamplona o Navarra.

CUANDO LAS INSTITUCIONES DEFENDÍAN EL EUSKERA

Artículo de Pello Guerra en Naiz.

A lo largo de la historia, las diferentes instituciones vascas han defendido el euskara como uno de los principales patrimonios de Euskal Herria. Desde el Consejo del Reino de Nafarroa, hasta las juntas y diputaciones, durante siglos se ha promovido la presencia de funcionarios que conocieran la lengua del país para que la ciudadanía, mayoritariamente euskaldun, pudiera participar en cualquier acto administrativo y recibiera educación en euskara.

 La defensa del euskara por parte de las instituciones vascas ha sido una constante a lo largo de los siglos. Así quedó en evidencia en las jornadas internacionales sobre “El euskara en las altas instituciones de gobierno a través de la historia” que se celebraron en la UPNA y de las que se han publicado recientemente sus actas en un libro con el mismo título.

Ese deseo de proteger y fomentar la lengua que hablaba la mayor parte de la población sobre la que gobernaban ya quedó patente en el siglo XVI. Mientras en la Nafarroa conquistada el euskara empezaba a ser perseguido por las autoridades españolas, en la parte del reino todavía independiente al norte de los Pirineos, los reyes de la dinastía Albret mostraban su sensibilidad hacia la lingua navarrorum. Así, en el Consejo Real, el conocimiento de la lengua vasca era «requisito indispensable para el desempeño de los principales oficios, como eran los de consejero y procurador general», al igual que el origen navarro, según señala el historiador Álvaro Adot. Esta norma se mantuvo vigente hasta 1624, cuando el citado órgano desapareció a consecuencia de la creación del Parlamento de Nafarroa durante el reinado de Luis XIII. En la nueva institución se suprimieron esos dos requisitos para formar parte de ella.
Ese modo de proceder del monarca formaba parte del proceso de integración de la Nafarroa independiente en Francia que había puesto en marcha el sucesor de Enrique III de Nafarroa y IV de Francia, y que puso fin al impulso que había recibido el euskara en ese territorio durante el gobierno de la dinastía Albret. En concreto, bajo su cetro se publicaron algunos de los primeros libros en lengua vasca, como el “Testamentu Berria” de Joanes de Leizarraga, que fue promovido por la misma reina Juana.
El texto de Leizarraga fue consecuencia de los nuevos tiempos que se vivían en el ámbito religioso. La Reforma propugnaba que las sagradas escrituras se tradujeran del latín a las lenguas vulgares para que el pueblo las pudiera entender. De esta manera se hacía patente una realidad lingüística que no se recogía de forma oficial, ya que la documentación de las distintas instituciones de esa época se recogía en latín, castellano, francés e incluso en occitano dependiendo de momentos y lugares, y donde no tenía espacio el euskara. Sin embargo, en la calle era la lengua predominante en la mayoría de los territorios, lo que exigía un proceso de traducción para que la población entendiera las decisiones de los distintos poderes.

Los sacerdotes como traductores. En este terreno de la mediación lingüística destacó el papel de los sacerdotes, ya que se manejaban en las dos lenguas. Al menos desde el siglo XIV, la Iglesia dispuso que «los fieles debían ser atendidos en su propio idioma. Por lo tanto, la casi totalidad de los curas, beneficiados y capellanes que ejercían en las comarcas vasco hablantes lo eran igualmente, independientemente de que además supiesen latín y castellano, o francés o gascón en su caso», según señala el historiador Juan Madariaga en la citada obra.
Aprovechando que el conjunto de la comunidad se reunía el domingo en la misa, los curas se encargaban de traducir al euskara y de dar a conocer desde el púlpito en esa lengua a sus feligreses disposiciones eclesiásticas y mandatos institucionales de las autoridades civiles (reales órdenes, mandatos de ayuntamientos sobre quemas de rastrojos, herencias, embargos, subastas...), para que nadie pudiera alegar ignorancia de los mismos. Esa mediación lingüística fue conocida como “publicata” y los sacerdotes cobraban de los ayuntamientos un promedio de unos 12 reales por año por las traducciones que tenían que ver con cuestiones relacionadas con las autoridades civiles. Este trabajo de traducción impulsado por los consistorios recurriendo a los sacerdotes se mantuvo hasta comienzos del siglo XIX, cuando las autoridades eclesiásticas pusieron fin a esa práctica.
Otro ámbito en el que también las instituciones vascas tuvieron en cuenta el uso del euskara fue en el de la Administración de Justicia. Así, en el Fuero Nuevo de Bizkaia (1526) se establecía que en los procesos judiciales, los testigos «que no supieren la lengua castellana, los examine y tome con otro receptor e intérprete». Ese derecho a la utilización del euskara por parte de la población en los procesos se recogía también en el fuero de Gipuzkoa de 1696, la Novísima Recopilación de los fueros de Nafarroa, los cuadernos de hermandad de Araba y las recopilaciones de Lapurdi y Zuberoa, según detallan los expertos Iñigo Urrutia y Xabier Irujo.
Los receptores de los tribunales eran los encargados de recoger los testimonios de los testigos inmersos en procesos judiciales y por ese motivo, en los pueblos vascongados era fundamental que conocieran euskara. Esa circunstancia hacía que los aspirantes a desempeñar ese cargo «debían ser examinados y aprobados en lengua vasca», según señala el experto Roldán Jimeno.
Ese dominio del euskara era fundamental para evitar inexactitudes y fraudes que podían derivarse del uso de intérpretes. Por ese motivo, se establecieron dos turnos de receptores: los romanzados y los que dominaban el euskara además del castellano. En Nafarroa, los primeros tenían como ámbito de actuación desde Tafalla hacia el sur y los receptores euskaldunes, desde esa ciudad hasta el norte. La división generó más de una disputa entre receptores, ya que los romanzados se quejaban de que los euskaldunes tenían más territorio de trabajo.
Esta situación se rompió en el siglo XVIII a consecuencia del centralismo de los reyes borbónicos. En 1766 se prohibió la impresión en otras lenguas que no fuera el castellano, al año siguiente se obligó a una enseñanza monolingüe en esa lengua a todos los niveles y en 1778 se impusieron comisarios romanzados en los pueblos vascongados.

Pulso por la educación. En el ámbito de la educación, ese afán por controlar desde el Estado la enseñanza para imponer el castellano entre los euskaldunes supuso la aparición de la práctica del “anillo escolar”. Esta consistía en castigar a los alumnos que hablaban en euskara. Un anillo era entregado al estudiante que había sido sorprendido hablando en lengua vasca y este podía deshacerse de él denunciando a un compañero que también hubiera empleado el euskara, y así hasta terminar la jornada. El último que tenía el anillo era castigado.
El problema se fue agravando porque esta práctica llegó a extenderse incluso fuera de la escuela, lo que motivó quejas por parte de los ayuntamientos. En un intento por proteger el euskara, los consistorios hacían todo lo posible por conseguir profesores euskaldunes, a los que incluso se animaba a enseñar en las dos lenguas, buscando el bilingüismo.
Esta competencia municipal que protegió el euskara en la enseñanza se vio amenazada en el siglo XIX por la ley de instrucción pública (1857), ya que implantó la estatalización del profesorado, aunque las diputaciones consiguieron mitigar en parte ese problema, de forma que se mantuvo el bilingüismo en la educación, según recogen Urrutia e Irujo.
Unos años más tarde, el euskara incluso llegó a convertirse en la lengua vehicular de la enseñanza. Fue durante la Segunda Guerra Carlista (1872-1876) y en esa época, la lengua vasca fue el idioma oficial de la Administración en la zona controlada por los partidarios de Carlos VII. Así, las juntas de instrucción de Bizkaia y Gipuzkoa marcaron sendas directrices para promover la enseñanza en euskara.
Pero la derrota carlista supuso la supresión de los Fueros en las Vascongadas, lo que eliminó los mecanismos empleados hasta entonces como cortafuegos al intento de aplicar un régimen monolingüe en la enseñanza. Ante esa amenaza, las diputaciones de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa reaccionaron formando un frente común para seguir contando con profesores bilingües. A pesar de ello, desde Madrid se continuó con la política uniformadora en favor del castellano y se siguió empleando el denigrante método del “anillo escolar”.
Tan solo en tiempos de la Segunda República española y a través del Estatuto para Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, se recuperó el bilingüismo educativo, ya que el euskara se convirtió en lengua oficial en esos territorios junto al castellano. Pero la Guerra del 36 y la posterior dictadura franquista pusieron fin a esa situación, que se equiparó a la ya existente en Nafarroa.
Tras la muerte de Franco, llegarían el Estatuto de Gernika para la CAV (1979) y el Amejoramiento para Nafarroa (1982). En el primero de ellos, el euskara volvía a ser lengua oficial en ese territorio, mientras que en el caso navarro, tan solo se daba carácter oficial a ese idioma en las zonas vascófonas, cuestión que quedó regulada por la Ley del Vascuence de 1986, en la que se establecía la actual zonificación del herrialde.


jueves, 27 de octubre de 2016

ORIGEN DEL ANTINABARRISMO

Iñigo Saldise Alda escribe sobre soberanismo nabarro.
26/10/2013

Origen del antinabarrismo
El nabarrismo es una opción política, de carácter patriótico, que está basada en una defensa a ultranza de la soberanía y libertad del Estado de Nabarra. Unido a su vez a una defensa de las diferentes culturas y lenguas de los pueblos que forman la Nación Nabarra, incentivando la cultura y lengua primogénita, que no es otra que la vascona.
Dicho esto, podemos afirmar sin ningún tipo de rubor, que el antinabarrismo es todo lo contrario. Además, como pretendemos con este escrito, lo consideramos una parte importante y necesaria en las labores esclavistas que el colonialismo español y francés ejerce sobre los nabarros, sin olvidarnos un colonialismo más oscuro, el religioso del Cristianismo Católico.
Bien, una de las grandes cualidades que han tenido y también tienen los imperialismos en la actualidad, lógicamente entre ellos están incluidos tanto el español como el francés, es la de conseguir darle la vuelta a todas las situaciones que les señalan e incluso les inculpan ante la opinión política y jurídica mundial. Normalmente se colocan siempre en el lado de una supuesta democracia, de una inexistente humanidad y por supuesto de una imaginaria justicia, siendo todas ellas innegablemente ficticias, engañosas y falsarias, pudiéndose incluso definir como de política infame y siniestra contra la humanidad, concluyentemente carente de toda veracidad histórica.
Todos los Estados imperialistas tienen como primera premisa, una vez llevadas a cabo las violentas e ilegales invasiones y ocupaciones, una vez no logrado el objetivo del exterminio, el conseguir la total o absoluta colonización y sumisión de los nativos, aborígenes o personas originarias del lugar, que son finalmente los naturales y dueños del Territorio, País o Estado conquistado.
Los imperios persiguen por todos sus medios, sin importarles lo más mínimo que estos sean violentos e ilegales, que sean los propios colonizados los que renieguen de su pasado en libertad, aceptando con ello su triste situación de ocupación y sometimiento.
Concretando en el imperialismo español y francés, legitimados desde el Vaticano, incluso han conseguido que la mayoría de los nabarros se puedan sentir hoy día cuales hombres libres, mostrando ante la opinión mundial la posibilidad de participar en unas elecciones con las cuales finalmente legitiman sus imperios y nuestra indudable situación colonial.
Muchos nabarros son incapaces de apreciar las cadenas que les tienen prisioneros, sometidos, subordinados y sumisos cuales esclavos. Esta labor colonizadora ha llegado a tal extremo, que los imperialistas españoles y franceses muestran incluso en símbolos patrios originarios de los nabarros dichas cadenas, eso sí, una vez manipulas y transformadas en beneficio de su engañosa y frágil unidad imperial. Una unidad innegablemente forzada y ciertamente nunca pactada, al menos en el caso nabarro, ya que fue realizada a través de diversas acciones violentas e ilegales de las armas.
Esta sensación de una supuesta libertad, de esa sensación engañosa y falsa en los naturales del Territorio, País o Estado Nabarro, está palpablemente ligada a la semilla colonialista española y francesa, necesaria al fin a cabo para el surgimiento del movimiento antinabarrista. Este principio político directamente contrario al nabarrismo, cuya iniciación es indudablemente de índole colonial, hunde sus raíces tras las primeras acciones armadas llevadas a cabo por los vecinos imperialistas de nuestro Estado, aunque Goñi Gaztambide lo sitúa incluso antes, concretamente en el asentamiento en tierras nabarras de nuevos núcleos de población franca y extranjera, con exclusión explícita de los naturales del País, los vascones libres o nabarros.
Hay incluso quien señala directamente a los monjes franceses de Cluny y de las Órdenes Militares Cristianas, quienes se encargaron de cambiar el Camino nabarro a Santiago, por el Camino francés, incentivando de paso el arte con esencia visigótica-hispánica-mozárabe en esa corriente clunianense reformista y gregoriana, con la introducción de la liturgia romana. Esto ocurrió durante el reinado Sancho Ramírez de Pamplona y Aragón.
El antinabarrismo de la Orden de Cluny quedó finalmente claro en el año 1076, cuando sin legitimidad política alguna, otorga el monasterio de Naiara-Nájera al emperador Alfonso VI de León y Castilla. Dicho templo fue fundado como Santa María la Real por el rey García Sánchez III de Pamplona y Aragón, y que había servido desde su consagración o fundación como panteón Real de Nabarra. La propaganda procastellana y antinabarra se potencia tras el año 1076 en dicho monasterio, siendo una pieza clave de ello la conocida como Crónica Najeriense.
Esto se da en otros monasterios, los cuales tras la forzada y violentada desmembración territorial de Nabarra tras la muerte de Alfonso I de Pamplona y Aragón, se posicionan con mayor o menor rapidez del lado antinabarro, es decir, del lado del invasor y colonizador extranjero de turno.
No podemos olvidar el antibarrismo con el cual actuaron los diferentes tenentes o funcionaros del Estado nabarro, al posicionarse con los distintos invasores y colonizadores, contando con el pago de títulos nobiliarios extranjeros, todos ellos siendo además de carácter hereditario y cuantiosas rentas personales.
Hoy día sigue vigente el antinabarrismo en muchos sectores de nuestra sociedad a lo largo y ancho de nuestro total y legítimo territorio. Incluso hay muchas variantes del mismo, las cuales merecen un análisis más exhaustivo y profundo, pero teniendo presente siempre las cusas de su origen que son la injerencia de agentes políticos, militares e incluso religiosos ajenos a los naturales del País; las ilegales invasiones y ocupaciones de nuestra Tierra por ejércitos extranjeros que dieron paso a la colonización, junto a la traición de importantes funcionarios del Estado nabarro para su beneficio personal y el de los imperios o Estados ajenos a los naturales del País y a todos aquellos pueblos que conviven con respeto y compromiso nabarro con los vascones del siglo XXI o vascos de esta parte de Europa.
En el ejemplo del esclavo negro de las américas es incomprensible pensar, que no se sintiera esclavo o que le pidiera permiso al amo para que le diera la libertad.
Pero en el caso de la tribu vasca, con la ayuda de algunos autóctonos, lo inimaginable se hace realidad y el colonizador consigue que estemos cargando con las culpas por años de resistencia armada. Este conflicto armado, según el imaginario del ocupante, solo tuvo un agente, un grupo de descerebrados que por gusto y esquizofrenia colectiva, se dedicaban a poner bombas y a matar a niños. Nunca hubo dos bandos en esta guerra, solo terroristas y un estado llamado de derecho, que se defendía de la barbarie.
Los soldados del reino portaban flores en sus fusiles y repartían caramelos escritos en euskera entre los niños vasquitos, para luego hablar en castellano durante los recreos.
Cientos de frases diseñadas en las universidades españolas para hacer que nos sintamos culpables, para culpabilizar a todo un pueblo por su resistencia y por su ocupación. 
Pues los navarros decimos que una mierda y recordamos al héroe Escocés William Wallas y os exigimos a los españoles lo mismo que el hizo con los Ingleses en 1297 en la Batalla de Stirling 97 años después de la conquista de Vitoria y el resto de la Navarra Occidental, “ no os pedimos, os exigimos que abandonéis de inmediato las tierras navarras y en vuestra retirada tendréis que ir pidiendo perdón uno por uno, a todos los navarros, por siglos de saqueos, violaciones y torturas por parte de vuestro reino”.
Como país que fue conquistado, los navarros no olvidamos ni perdonamos hasta que consigamos la libertad. No aceptamos procesos de paz con los enemigos, hasta que seamos de nuevo un estado y firmemos dicha paz. No reconocemos ningún tratado ni ponencia de paz, que haya sido firmada por los mal llamados representantes políticos vascos, el único sujeto legalmente capaz para firmar dicha Paz, será el pueblo navarro y su gobierno democráticamente elegido.
Los Navarros tenemos nuestro estado, que pese a estar ocupado por dos potencias extranjeras, nos da los razonamientos legítimos para poder hablar así, como estatalistas, como defensores de nuestro pueblo, nuestra cultura y nuestro ordenamiento jurídico pirenaico.

 http://www.astekaridigitala.net/noticiasDetalle.asp?tm=5&sb=21&id=32712


domingo, 23 de octubre de 2016

¿QUE TIENE QUE OFRECER NABARRA-NAFARROA-NAVARRA AL MUNDO?

POR GAIZKA BASALDUA SAUTO

Cuando en el curso de los acontecimientos humanos se hace necesario que un pueblo disuelva los vínculos políticos que lo han ligado a otro y tome entre las naciones de la Tierra el puesto separado e igual al que las leyes de la naturaleza y del Dios de esa naturaleza le dan derecho, un justo respeto al juicio de la humanidad exige que declare las causas que lo impulsan a la secesión.

Nosotros no somos las 13 colonias británicas norteamericanas que en 1776 declararon su independencia. Nuestros condicionantes, nuestras circunstancias, y las motivaciones que nos mueven pueden perfectamente no parecerse en nada a las de los denominados padres fundadores. Pero llegado el caso, al igual que ellos deberemos hacer exposición clara de lo que nos mueve, de lo que nos impulsa a pedir libertad sin ambages. Y eso será justo.

No nos mueve ni la codicia ni las ansias de poder. Los que hoy nos reunimos no pretendemos sino la mejora de la vida de nuestros congéneres, de nuestros conciudadanos. Y lo pretendemos sin entorpecer la existencia de nadie. No estamos aquí para restar sino para sumar. Para que aquellos que quieran sumar puedan hacerlo. Pero sin obligar.

Se está obligando a demasiadas cosas, de forma demasiado rápida, y sin atender demasiado al bienestar de la gente. La cuerda se está tensando y terminará por golpear a alguien en la cara. Godfrey Bloom, europarlamentario británico del UKIP exponía en la Eurocámara que aquellos que nos gobiernan están jugando con nosotros, que viven con soltura y sin preocuparse por nada mientras que el ciudadano de a pie mira impertérrito. Pero les advirtió de que en el momento en el que los ciudadanos se dieran cuenta de la realidad asaltarían la cámara enfurecidos para colgarlos a todos, y que tendrían razón.
En Ucrania avanza el nazismo, el Imperio Ruso sigue mecido por la mano del gangsterismo, EEUU se atrinchera en el miedo y mientras tanto la Vieja Europa languidece, sin rumbo, como una voz que se apaga en la noche.

¿Y qué hace la gente? ¿Se puede decir que la gente esté apática? Yo más bien diría que la gente está sedienta. Sedienta de nuevos paradigmas en los que pueda votar, organizar, dar forma, construir, definir, estructurar, trabajar, cooperar, orquestar, ser parte activa o pueda delegar de forma activa. Queremos más que nunca ser capaces de gestionar nuestra libertad. Decir hasta dónde queremos ejercerla sin que nos pongan cortapisas.

Queremos, por qué no decirlo, decidir. Decidir qué se hace con un tren de alta velocidad, qué se hace con una autopista, qué se hace con los medios de producción eléctrica, qué se hace con el sistema financiero, qué se hace con los medios productivos, con la producción agrícola, qué se hace con un representante que se mofa de sus promesas y se vende a poderes extranjeros y sombríos, poderes sin rostro. Queremos decidir qué se hace con nuestro estado. Con Nabarra, nuestro estado conquistado.
Cuando se habla del derecho a decidir enseguida sintonizamos la radio con el debate independentista, cuando sólo en parte tiene que ver con ello. En realidad, el derecho a decidir es algo mucho más pequeño, más sencillo, más primario. El derecho a decidir es la base de la libertad, y cuando éste es negado se convierte en la base de la rebelión, que según La Fayette era el más sagrado de los derechos y el más indispensable de los deberes.

En esta encrucijada, la lucha por la vuelta a la independencia del estado de Nabarra es una lucha por la libertad y por el derecho a decidir, una lucha para recobrar el control de nuestros destinos que nos ha sido robado y ultrajado, no sólo a los vascos, sino también a los castellanos, a los aragoneses, a los riojanos, a los pasiegos, a los gascones, a los extremeños y manchegos que habitan el viejo reino, todos ellos navarros por derecho de sangre y suelo
.
No se reclama la independencia de Nabarra por que sí. No somos arlotes que se juntan porque no tienen nada mejor que hacer. La independencia de Nabarra tiene un fin concreto que es la mejora de la vida de la gente y toda su administración debe tener como objetivo único dicha meta. El espíritu conciliador del edicto de Nantes no hace sino reflejar la idiosincrasia de su precursor, Enrique de Nabarra y del ser navarro en general. “Una gallina en las ollas de todos los campesinos”. No estaría mal que viendo el percal, empezáramos por ahí. Aunque sin duda tendríamos muchos frentes entre los que elegir un comienzo.
Se decía de Esparta que sus murallas eran los escudos de sus espartiatas y sus fronteras las puntas de sus lanzas. En una sociedad de la antigüedad como era la de las poleis griegas e incluso hasta hace no demasiados años, los estados se construían a golpe de mandoble y a paso de ganso. En la sociedad del siglo XXI no se debería reconstruir ningún estado ni obligar a ninguna sociedad (caso de la navarra) a ser parte de un estado por la fuerza de las armas. Las herramientas de que disponemos son mucho más sutiles, no requieren del sufrimiento ni de la muerte, y sin embargo pueden ser realmente poderosas. El ejemplo espartano es interesante por lo sutil y amoldable.

En el caso de la definición del territorio navarro tenemos claro cuál ha sido la extensión máxima de Nabarra en su historia. ¿Quiere esto decir que ésa debe ser la extensión del estado? Obviamente no, es un marco en el cual nos movemos para poder reconocer unos derechos pero en ningún momento es principio y fin. Las fronteras de Nabarra no serán definidas por un mapa, ni por la punta de nuestras lanzas, sino por la libre decisión de sus ciudadanos, los cuales, rompiendo con marcos impuestos, sean los de las provincias españolas o los de un muy mal entendido “zazpiak bat” deberán pronunciarse y proclamarse como navarros, como miembros del estado navarro.

Y en su defensa no será necesario que construyan murallas pues su escudo será todo un corpus legal ya existente desde la edad media que una vez actualizado a los tiempos podrá dar voz, decisión y libertad a los ciudadanos. Pieza central de la organización política y social, en los Fueros encontramos la herramienta clave para la articulación de los esfuerzos de la sociedad.

A través del ejercicio del derecho a decidir y teniendo claro que ya teníamos nuestras propias leyes que no han sido sino pervertidas durante 800 años, no nos queda sino plantarnos y decir que basta. Que basta de conquista, que basta de atropellos, que basta de no poder decidir nuestro futuro. Que queremos organizarnos en asambleas municipales, comarcales, provinciales y estatales. A través bien sea de la participación activa o de la delegación activa.

Ver a través de ello que nos podemos entender, que podemos convivir seamos de la etnia que seamos o de la ideología que seamos, que podemos conseguir el bien común, que no somos unos zotes a los que hay que decir qué es lo bueno y qué es lo malo porque tenemos discernimiento propio y concienzudo, y que podemos conseguir la liberación de las mentes de los ciudadanos.

Al igual que Churchill no tenemos nada más que ofrecer sino sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor, y cuando nos pregunten, ¿qué tiene que ofrecer Nabarra al mundo? Podremos decir, libertad.


martes, 23 de agosto de 2016

IPARRALDE : ZONA NORTE EN EUSKERA

Eneko del Castillo
Blog Nabarlur

Erroneamente se le llama así únicamente a la parte euskaldun del Estado francés (Pays Basque). Al llamar de esa manera a una parte del país se le priva de su verdadero nombre (como pasa en el antiguo reino de Valencia a la que se llama Levante "español").

Históricamente ha sido parte de las provincias de Aquitania, Novempopulania, Vasconia, Wasconia, Gasconia, Guiena... Y pertenecido a tres reinos o estados Navarra, Inglaterra y Francia.

En la Edad Media, "iparralde" se denominaba "Tierra de bascos" y estaba conformado por varios vizcondados y señoríos: Lapurdi, Agramont, Amikuze, Oztibarre, Baigorri, Arberoa, Garazi, Zuberoa... que dependían del señor de Vasconia y del rey de Navarra. La llegada de los ingleses supuso la pérdida de Lapurdi (1177) y Zuberoa (1261).

Tras la conquista francesa en 1620 de la parte de Navarra que continuó independiente desde 1527 pasó a llamarse baja Navarra y con Bearne se hizo una provincia: Basse Navarre et Bearn. Lapurdi continuó en la provincia de Guienne et Gascogne. El valle de Soule o Zuberoa alternó la pertenencia a estas dos provincias.

Tras la revolución francesa estos territorios (que no provincias) pertenecen al departamento de Bajos Pirineos, hoy Pirineos Atlánticos.

Sin embargo el nombre de "iparralde" también pertenece a Bizkaia, Gipuzkoa y otras partes del país que como muestro en el mapa están en la vertiente cantábrica, es decir, la parte cuyos ríos vierten sus aguas al mar cantábrico.



lunes, 15 de agosto de 2016

PERDIMOS NUESTRO DESTINO, AL PERDER NUESTRO ESTADO,NABARRA

 Gaizka Basaldua Sauto

Perder nuestro estado supuso perder las riendas de nuestro destino. En la política internacional, en las relaciones comerciales y diplomáticas, en todo dependeríamos de España hasta el día de hoy.
La pérdida de nuestro Estado trajo consigo una eterna lucha para mantener nuestro estilo de vida, nuestras costumbres. Y no hablamos sólo de algo cultural. Hablamos de Derechos y Libertades. Los Fueros.
Mientras que Navarra fue independiente las leyes de todos los navarros, los Fueros, se mantuvieron en vigor en los territorios conquistados. No sólo por ser lo normal en la fecha, sino porque una revocación de los Fueros podía traer consigo la rebelión tanto de nobles como de gentes del común, volviendo en consecuencia esos territorios al Estado de Navarra que sí garantizaba sus derechos y libertades. Mantener los usos y costumbres del lugar inalterables fue una forma de granjearse la lealtad de los conquistados hacia los conquistadores. Incluso una vez que toda Navarra fue conquistada los fueros se mantuvieron, por un lado por ser lo propio de la forma de pensar de la época que no tendía a la uniformización, pero sobre todo porque se temía una rebelión. Y no era para menos. Los ataques reiterados a los fueros trajeron consigo las "matxinadas" de los siglos XVII y XVIII y la Zamacolada, estuvieron en el germen de la Primera Guerra Carlista, y España no paró hasta eliminarlos por completo en 1876 tras una Tercera Guerra Carlista.
Eliminaron nuestra libertad, cercenaron nuestros derechos. ¿Qué nos queda de aquél Estado perdido? Cuando nos hablan del Concierto económico nos hablan de un privilegio. Pero no es sino el último vestigio de nuestro pasado independiente. El pasado de una sociedad que durante siglos se mantuvo independiente, y durante siglos siguió ingobernable. Es el impuesto colonial que debemos seguir pagando por haber desafiado al absolutismo, a la uniformización y al imperialismo. Saben de lo que somos capaces como sociedad y no nos dejarán desarrollarnos hasta el extremo de asombrar al mundo. Deberemos ser nosotros mismos los que rompamos las cadenas de los conquistadores para reconstruir nuestro Estado de acuerdo a las necesidades actuales. Dar a los juventud oportunidades y futuro, y a la vejez seguridad. Para defender el derecho a la vida, a la libertad y la búsqueda de la felicidad.
En el día de hoy recordamos que ya fuimos independientes, que ya tuvimos nuestro estado. Que fue conquistado por medio de las armas. Más aún, recordamos que ya tenemos nuestro estado y reivindicamos nuestro derecho a recuperarlo, a volver a ser libres y dueños de nuestro presente para construir el futuro.
En el día de hoy recordamos a todos los que lucharon por defender nuestros derechos y dieron su vida por la Libertad y la Justicia.


viernes, 29 de julio de 2016

AMAIUR 1522

200 hombres nabarros contra 10.000 soldados

La importancia de este lugar radica en la resistencia opuesta por los navarros partidarios del rey Enrique II los años 1521-1522 tras el último intento de reconquista del reino por parte del rey Enrique, tras la invasión de Navarra realizada en 1512.
Después de la derrota en la batalla de Noáin, los navarros fieles al rey Enrique II de Navarra se refugiaron en los dominios de los Albret al otro lado de los Pirineos (en el Bearn y en la Baja Navarra). En septiembre de 1521, hicieron otra incursión en el valle de Baztán-Bidasoa y conquistaron el castillo, respetando la vida del alcaide y de la guarnición castellana del castillo. Se quedó en el mismo una guarnición de unos 200 navarros, al mando de Jaime Vélaz de Medrano.
A principios de febrero, las tropas castellanas comienzan a efectuar incursiones en el valle. El 14 de marzo, toman la fortaleza de Orzorroz. El 17 de junio de 1522, tras una batalla, ocupan también la villa de Santesteban, cortando la comunicación de Maya con Fuenterrabía. El virrey castellano, conde de Miranda, ordenó el 3 de julio la toma de Maya. Las tropas castellanas con navarros beamonteses cercaron el castillo con unos 10.000 hombres, contra los 200 del castillo. En el castillo estaban dos de los hermanos del que posteriormente sería San Francisco Javier. Los navarros resistieron varios ataques desde el 15 hasta el 22 de julio, en que capitularon.
Los prisioneros fueron llevados a Pamplona, donde, a los 14 días, Jaime Vélaz de Medrano, el que había sido alcaide, y su hijo, fueron envenenados..

INFANZONES DE OBANOS


 por Antonio Urra Maeztu

La Junta de Infanzones de los siglos XIII y XIV haría buen papel en la Navarra actual. La institución de los Infanzones fue tolerada en su nacimiento por Sancho VII el Fuerte y menos aceptada por los Teobaldos de Champagne y Enrique I. Fue una institución independiente, elegida democráticamente y que representaba a las distintas comarcas del Reino. Se les llamó Infanzones de Obanos porque se reunieron muchas veces en este pueblo céntrico dentro del Reino, el Ayuntamiento de Obanos recoge en su escudo el sello de los infanzones con la inscripción: Pro libertate patriae, gens libera state, que viene a decir en castellano, más o menos, Sed libres para que la patria sea libre. Los objetivos de la junta fueron: defender al pueblo de los posibles atropellos de los mandatarios y exigir al Rey el juramento para que defendiera la identidad, los derechos, libertades, usos y costumbres de Navarra. Los infanzones no toleraban a los gobernadores extranjeros por no haber nacido en Navarra, los imponían los reyes de Champagne, sin conocer los usos costumbres y la identidad del Reino. La Junta de Infanzones no cayó bien a algunos reyes y, a veces, tampoco a la Iglesia, sufrieron excomuniones, destierros y hasta ejecuciones. El papa Gregorio IX intentó disolverlos. Se tildó a la Junta de subversiva y en ocasiones debió actuar desde la clandestinidad. Difícil resumir toda la actividad de la Junta de Infanzones durante aquellos dos siglos. Fue una institución, aunque antigua, plenamente democrática y sumamente exigente con la actuación de los reyes. ¿Tolerarían nuestras autoridades de hoy una institución semejante que defendiese, hasta las últimas consecuencias, nuestra lengua cultura e identidad?

jueves, 17 de marzo de 2016

EL EUSKERA MARCA LOS LÍMITES DE NUESTRO ESTADO, NABARRA

Los nombres en euskera de las diferentes localidades, marcan claramente los limites naturales e históricos de nuestro Estado de Nabarra, esto es indiscutible.
Que en estos territorios no existe la conciencia de Estado de Nabarra, también es indiscutible.
Esta es nuestra labor, hacer llegar la historia de nuestro Estado a todos los implicados y demostrar que las raíces de esos nombres, no son pura casualidad, si no historia, lengua y cultura pura y dura.
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Nabarra no necesita a nadie que le conceda auto-gobierno, no necesita ser tutelado por ningún estado , no necesita que lo administren, no reconoce a ningún estado superior a él. Nabarra fúe y es, un cimiento apoyado en la historia y el sufrimiento que nunca se podrá olvidar. Por eso Nabarra está todavía viva y quiere seguir viviendo.
Este mapa se escapa a todas las lecturas intencionadas o malintencionadas, que sitúan el conflicto en ETA. La raíz del problema Vasco está, en la conquista e invasión por la fuerza, del Reino de Nabarra.

La guerra de los 1.000 años entre vascones contra los extranjeros aún continua y continuará.
Esperar que los agentes políticos o sindicales solucionen el conflicto, esta archidemostrado que es imposible. Solo el PUEBLO, es el único sujeto real capaz de desmontar todas las traiciones, intereses, ambiciones y mezquindades que rodean a los politicos.
La unión económica de todo el Estado de Nabarra, haría temblar los cimientos de los países artificiales. Lease España o Francia.
La historia demuestra que las revoluciones existen.
Contraponer a la mentira, la verdad.
El estado de Nabarra tiene nombres y apellidos y están distribuidos a lo largo y ancho de su geografía, las tierras de Nabarra, las tierra de los pueblos Vascos.

HONDARRIBIA, EL ÚLTIMO PUERTO MARÍTIMO DE NABARRA

Artículo en Facebook
Felix Likiniano

HONDARRIBIA, EL ÚLTIMO PUERTO MARITIMO
Tras la batalla de Noáin, el Reino de Navarra perdió definitivamente su independencia; pero al mal de la conquista hay que sumar las reiteradas mutilaciones que a lo largo de los siglos sufrió el territorio navarro hasta quedar reducido a una caricatura de lo que llegó a ser.
Navarra fue severamente castigada, antes y después de la conquista de 1512. En el año 1200 se produce la conquista de la Navarra occidental o marítima. Hondarribia, cuya fortaleza fue levantada por Sancho Abarca en 970-999 y fortificada por Sancho VII el Fuerte; su población perteneció al reino de Navarra hasta que en 1199-1200 le fue arrebatada por Alfonso VIII de Castilla, quien en 1203 le otorgó el Fuero de San Sebastián.
Pero la pérdida de territorios no se frenó. En el año 1463 Castilla ocupó las poblaciones navarras de San Vicente de la Sonsierra, La Guardia, Viana y Los Arcos, aunque en el 1466 la ciudad de Viana se sublevó contra los castellanos y volvió a Navarra. Y no fue hasta 1753 cuando Castilla devolvió a Navarra las poblaciones de Los Arcos, Armañanzas, El Busto y Sanzol, pero no así la comarca de La Guardia, la Sonsierra navarra, que, habiendo pertenecido durante siglos a la Merindad de Estella, pasó definitivamente a Álava. En 1530, ya después de la conquista, nos quitaron también la Baja Navarra. No es justo que además de conquistar un reino soberano, lo dividan y troceen y se lo repartan como una tarta. El mal menor hubiese sido que todo el territorio del Reino navarro hubiese pasado íntegramente a un solo Estado. Invadieron, conquistaron, dividieron y destrozaron nuestro reyno, y en 1841 nos dieron la puntilla: mataron lo que quedaba de reino. Navarra no se merecía un final así.
Cuando a un Estado le cierran la salida al mar acaban estrangulándolo. Eso es lo que hicieron con la nación navarra. Baiona fue el primer puerto navarro hasta que en el siglo XI, cegado por las arenas de las Landas, quedó prácticamente inservible. Ello propició un importante movimiento de población gascona ,burguesía de armadores y comerciantes de BaIona, hacia Donostia, donde encontraron seguridad al amparo de sus murallas. La villa de Donostia nace para ser puerto del Reino pirenaico, pero en el año 1200 con la conquista de Gipuzkoa pierde su salida al mar.
Donostia y Hondarribia, fueron poblaciones navarras que pertenecieron a nuestro reino hasta que le fueron arrebatadas por Alfonso VIII de Castilla. Años después estas dos villas volvieron a pertenecer a Navarra. Así en el año 1256, el rey Alfonso X de Castilla entregó a Navarra las villas de Donostia y Hondarribia “con todas sus rentas de mar y de tierra” y aún se conserva en el Archivo de Comptos de Pamplona el documento extendido en pergamino, con el sello de Alfonso X, en virtud del cual el monarca castellano da al Reino de Navarra estas dos villas guipuzcoanas, aunque la situación revertió. De esta forma Navarra perdió su puerta natural al mar a través del río Bidasoa.
Desde entonces Navarra ha añorado una salida al mar y ocasionalmente ha intentado tener un puerto en propiedad para poder exportar directamente sus productos. Pero esa añoranza no ha sido sentida solo por Navarra; Hondarribia también intentó en varias ocasiones separarse de Gipuzkoa volver a Navarra. Así, en 1639, entró en tratos con la Diputación navarra para intentar su incorporación. De 1638 a 1655, Hondarribia dejó de asistir a las Juntas Generales de Gipuzkoa y, ante la negativa de sus ciudadanos de volver, acordaron separarla de la Hermandad.
Tras 15 años de pertenencia a Navarra, Hondarribia fue aceptada nuevamente en la Hermandad.
En 1702, las Cortes de Navarra estudiaron la reincorporación de Hondarribia, y encargaron a la Diputación que negociara el asunto. No hubo avances. Pero en 1754 Hondarribia retomó la iniciativa y pidió su incorporación, solicitando también que se le concediera asiento en las Cortes y se le permitiera conservar su gobierno jurisdiccional sobre Irún, Lezo y Pasaia. En esta ocasión, la desidia de la Diputación hizo naufragar el proyecto.
En el siglo XIX se llevaron a cabo diversas reformas en la división territorial del Estado, y en el año 1805 el rey Carlos IV de España firmó la real orden por la que se ampliaban los límites del Reino de Navarra, incluyendo en los mismos la ciudad de Hondarribia, Irún y Lezo. La segregación suscitó la firme oposición de las Juntas de Gipuzkoa, por lo que se tuvo que preparar con el mayor sigilo pero La población era favorable a la unión con Navarra.
La orden de segregación se decretó el 26 de septiembre de 1805,pero la Guerra de Independencia y la involución política España al regreso de Fernando VII provocó que se revocase la anexión a Navarra el 18 de agosto de 1814.Fue el fin.
Es muy difícil unir lo que lleva tanto tiempo separado.
En el caso de Navarra, el desgarro casi continuo al que ha sido sometida a lo largo de los siglos, ha creado una comunidad cerrada sobre sí misma. Los vascos de la C.A.V. también siguen sometidos desde hace 814 años, cuando Castilla torció violentamente su destino y los arranco de su tronco común.
Ahora, aun sin fuerzas, toca levantarse, mirar a nuestro alrededor y abrir de par en par las puertas del viejo Estado navarro para que puedan entrar aquellos pueblos, que pese a ser navarros por naturaleza, están fuera.
Una de mezcla de ingenuidad y necesidad, me permiten soñar con que el ejercicio del derecho a decidir nos permita, de forma estructurada y estratégica, ir agregándonos, municipio a municipio, desde Ipar Euskal Herria y la CAV, a Navarra. Recuperemos nuestra territorialidad. Reconstruyamos el Estado Navarro, dotado de libertades y de justicia social.

martes, 15 de marzo de 2016

ESPAÑA..¡MIENTE!, NABARRA.¡ESNA!-¡DESPIERTA!

No se si merece la pena contestarles a la derecha, pero ahí va, porque se ha lucido mintiendo sobre los muros y sobre su España en el Congreso
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PRIMERO, dicen que en Europa no hay muros..?????
¿Nos toman por tontos?¿Y el muro que se ha levantado a los refugiados? ¿Y el muro que tiene levantado España en Ceuta y Melilla? ¿Y el muro que tiene Israel levantado a Palestina?
SEGUNDO."No hay conflictos de soberanía".. ?????
Catalunya, Nabarra.., Claro, el conquistador que domina al conquistado, nunca verá conflictos, pues nos tienen sometidos, y la palabra de los diferentes pueblos que están sometidos en el Estado español , a los españoles se las suda. No tenemos derechos. Nabarra no tiene derechos al estar conquistada, ni derecho a tomar nuestras propias decisiones. 17 leyes aprobadas por la mayoría del paralamento navarro y retiradas por el Estado español.
TERCERO. "No cabe la imposición de las irrealidades". Ellos llevan imponiendo "su" irrealidad a las nabarras y nabarros más de 500 años respecto a la conquista de 1512, y mas de 700 tras el asedio a Gasteiz, y las pérdidas de Gasteiz, Durango,San Sebastian, y anteriormente La Rioja y otros territorios históricos nabarros.
CUARTO. "Una historia de éxito de mas de 500 años","juntos hemos logrado 500 años de convivencia".
Pues resulta que durante estos últimos 500 años, ha habido en diversos momentos que las nabarras y nabarros han intentado recuperar nuestra independencia, y España nos ha cortado las alas en todos estos intentos. La mal llamada ¿conviviencia?, la han conseguido sometiendo a las nabarras y nabarros a base de imponer y de numerosas prohibiciones. La Ciudadela fue un ejemplo de ello, se construyó, porque tenían todavía miedo de que las nabarras y nabarros intentaran recuperar su independencia. Las murallas de la Ciudadela de Iruña, se levantaron para vigiliar y controlar a las nabarras y nabarros..
TERMINANDO... Lo peor de todo esto, es lo que sí han conseguido, colonizar mentalmente a la mayoría de nabarras y nabarros, y pensemos que lo que dicen desde España los partidos como PP, o Ciudadanos, o aquí UPN, o el mismo PSOE, que sea verdad, lo peor es que se lo creen muchos. Nos han enseñado a no querernos, nos han enseñado a no querer y no sentir Nafarroa-Nabarra-Navarra como algo propio, ocultando nuestra historia o simplementen mintiendo, como decir que fue una unión, cuando en realidad fue una invasión y conquista.
Pero yo quiero pensar que no, yo quiero pensar que dentro de cada una y cada uno de nosotros, Nabarra vive- Nafarroa Bizirik, que ese sentimiento de ser solo nabarras y nabarros está ahí, que está dormido, y que tenemos que ayudarnos los unos y unas a las otras y otros, a despertarnos..
NAFARROA ESNA! NABARRA DESPIERTA!